Día 15 de octubre de 2013, Pearl Jam publican su décimo disco de estudio, «Lightning Bolt». Sin duda, uno de los acontecimientos discográficos de la temporada, el regreso de uno de los grupos que, primero, fueron estandarte del grunge y el indie/alternativo (o como quieran llamarlo), y luego estaban llamados a liderar el futuro del rock, pero nunca acudieron a la cita (y eso que agradecimos muchos por motivos que no vienen al caso). Estoy expectante, lo confieso y, como suelo hacer, evito escuchar muchas canciones de mis grupos favoritos cuando sacan un disco. Sí, está «Mind Your Manners» y «Sirens», y más canciones, hasta todo el álbum. Pero prefiero esperar a tenerlo en mis manos, degustarlo una y otra vez.
Llevo varias semanas pensando en cómo voy a enfocar el nuevo disco de Pearl Jam. Tenía una idea preconcebida bastante clara, la verdad es que con pocas esperanzas en su nuevo trabajo. Vale, los 90 quedaron muy atrás, y poca gente puede presumir de una tríada como «Ten» (1991), «Vs.» (1993) y «Vitalogy» (1994). Tampoco del giro dado con «No Code» (1996), o de ser capaz de publicar un disco como «Yield» (1998), cuando muchos se sorprendieron (el que firma también) por «No Code», un disco que gana y gana con los años.
Luego vino «Binaural» (2000), que pilló a muchos con el paso cambiado. Y con «Riot Act» (2002) parecían levantar. Pero Pearl Jam ya no podían ser el Pearl Jam de principios de los 90, ni podían ni debían. Tras cuatro años de silencio, Vedder, Ament, Gossard, McCready y Cameron regresaban con «Pearl Jam» (2006), saludado como una vuelta a los orígenes. Pero, en mi opinión, un disco más efectista que efectivo. Sin embargo, con «Backspacer» (2009) parecía que algo se había agotado, o ya lo estaba, a pesar de que las críticas volvieron a ser buenas, pero…
Y llega «Lightning Bolt» y las dudas vuelven. Han pasado cuatro años y en los mismos nos hemos puesto las botas con Pearl Jam. Reediciones suculentas de «Vs/Vitalogy» (2011), tras la de «Ten» (2009), un directo como «Live on Ten Legs» (2011) y la banda sonora de «Pearl Jam Twenty» (2011), el documental hagiográfico de Cameron Crowe. Además de las giras y los proyectos alternativos, incluido el soso «Ukulele Songs» (2011) de Eddie Vedder.
Queda poco para resolver la duda, me reservo la opinión de los singles escuchados hasta el momento. Sin embargo, e intentando no resultar intoxicado, he leído críticas superlativas, algunas que no me esperaba, en revistas y blogs de todos los colores y tendencias. ¿Remontarán el vuelo Pearl Jam?, ¿conseguirán elevar el nivel y situarse ya no cerca de sus obras maestras sino de sus discos notables?, y que conste que no nos mueve la nostalgia. En breve, en este mismo lugar.