Esta semana nos toca regresar a Vitoria a uno de nuestros festivales favoritos, el Azkena. Allí estaremos el viernes 24 de junio para ver a Chris Isaak, The Cult, Loquillo, Union Carbide Productions, entre otros. Pero nos llevamos una gran alegría al ver que en el cartel de ese mismo día se colaba Michael Kiwanuka, uno de nuestros artistas preferidos del 2016. De hecho, el tema ‘Love & Hate’ del disco homónimo fue elegido por nosotros como nuestra canción del año pasado. Kiwanuka publicó un segundo trabajo producido por Danger Mouse que alcanzó un importante reconocimiento por parte de la crítica. Unos meses antes de su publicación, fue Javier Castro el que descubrió a Michael Kiwanuka y su primer disco, este Home Again publicado en 2012 y que recordamos ante su concierto en Azkena. Londinense de origen ugandés, Kiwanuka destaca por una profunda y potente voz y por unas canciones que mezclan el Soul y el Folk, especialmente en su primer disco. Antes, en 2011, cuando había publicado un par de EPs, había sido telonero de toda una Adele, lo que le valió una importante visibilidad y fichar por una major como Polydor.
Su debut, Home Again, le colocó en el número 4 en el Reino Unido, posicionándose como un cantautor en primera línea. Nos encontramos ante un trabajo intimista, con clase, pero que en ocasiones peca de monótono. Comparado con Bill Withers, Marvin Gaye, Otis Redding e incluso Van Morrison, entre otros, encaja más con el primero por el carácter de su música, al menos en este primer disco. El comienzo de ‘Tell Me a Tale’ es soberbio, producción acertada, flauta y vientos, esa clase de Soul con un suave toque jazzístico en el que domina su voz. Con ‘I’m Getty Ready’ se mantiene en el nivel del inicio, una canción más acústica y con un estribillo que encaja muy bien. Y ‘I’ll Get Along’ también se situaría en ese ‘Smooth Soul’, otro tema de gran delicadeza y unos arreglos de nuevo acertados. En ‘Rest’ entra en una dinámica más melancólica, es una canción triste que tiene el contrapunto de la guitarra eléctrica. Y la primera parte del disco se cierra con las más Folk ‘Home Again’, más acústica aunque luego la complejiza.
Con una primera parte sobresaliente, la segunda se resiente, algunas canciones son más monótonas y otras están menos conseguidas. Es el caso, en mi opinión, de una ‘Bones’ que tiene una batería con escobillas y un tono diferente, quiere darle un punto más festivo pero le sale un tanto antiguo. Pero en ‘Always Waiting’ ofrece uno de sus mejores temas, una canción con un cierto toque épico, destacando la guitarra acústica del comienzo y un tono más crudo. En ‘I Won’t Lie’ parece querer construir como un himno pero tampoco acaba de funcionar mientras que ‘Any Day Will Do Fine’ combina acertadamente los vientos y las cuerdas. El cierre es para la agradable ‘Worry Walks Beside Me’, una canción donde de nuevo aparece claramente ese Soul suavizado.
Kiwanuka hizo un notable debut, pero como decía Javier Castro en la crítica de Love & Hate, era un artista todavía por definir. Podía haber derivado en una versión masculina de Adele pero no, ha seguido su camino y la producción de Danger Mouse, para algunos negativa, creemos que ha sido acertada en este caso. El primer disco de Michael Kiwanuka es ideal para un día de lluvia (sí, sé que estamos en una ola de calor), y muestra a un artista más maduro que la edad que tenía. Home Again es un disco como muy de otra época, pero no cae en los vicios del revivalismo sino que muestra también una gran personalidad. Nosotros tenemos muchas ganas de verlo en directo y lo vamos a disfrutar.