Segunda tanda de canciones de 2019 en Los Restos del Concierto. Diversidad de nuevo con un «ilustre maldito» como es Rafael Berrio, siempre destacado; con la sorpresa del giro de Sturgill Simpson; la confirmación de Whitney; el impacto de La Casa Azul; y una de las revelaciones del año como son Big Thief.
15. Albolir el alma de Rafael Berrio.
Para grabar ‘Niño futuro’ volvía a reunir a la banda y, acompañado de ilustres músicos guipuzcoanos como Fernando Neira o Joseba Irazoki, obtenía unos excelentes resultados no solo a partir de su habilidad como letrista sino también en el apartado melódico. Abolir el alma destaca por su calidez y alma (valga la redundancia), bebe de fuentes souleras y se sostiene en las guitarras y el estribillo, especialmente en la parte final en que colabora la también donostiarra Elena Setién, y es una apropiada puerta de entrada al a veces complicado pero siempre brillante universo de Berrio.
14. Make Art Not Friends de Sturgill Simpson.
Sturgill Simpson nos sorprendió hace unos años con un sonido Country Folk más tradicional, pero con Sound & Fury, que en unos días comentaremos en Los Restos del Concierto, ha dado un giro estilístico hacia un Rock de guitarras con reminiscencias Blues, Southern Rock y de ZZ Top. «Make Art Not Friends» es una de las canciones más destacadas del disco, un tema que apunta en varias direcciones al comienzo pero que, tras un inicio instrumental, se va hacia un toque ochentero que te va contagiando.
13. Used to Be Lonely de Whitney.
Whitney fue una de las revelaciones del año 2016 con ese sonido de Soul, Pop y Folk con la voz de Julien Ehrlich en primer plano. El siguiente disco siempre es una incógnita pero Whitney lo solventaron perfectamente con Forever Turned Around donde aparece una canción como «Used to Be Lonely». Whitney tiran de melodías y armonías, así como con esos fondos que las mecen. Una canción que va ganando con las escuchas.
12. El momento de La casa azul.
Le costó a Guille Milkyway publicar su disco La gran esfera, adelantado por unos cuantos singles que nos llevaban a sonidos electrónicos y de discoteca y a unas canciones que ya no podías quitarte de encima. Con una primera parte del disco espectacular, era difícil elegir una de ellas para la lista de las mejores de 2019, pero es la brutal letra de «El momento», la ruptura de un matrimonio sumido en la rutina tras años de esfuerzos, con una base musical electrónica y discotequera contenida hasta el último tramo que, a pesar del contraste, funciona a la perfección.
r11. Forgotten Eyes de Big Thief.
Para quien esto escribe, y quizás para muchos otros dada su juventud, este haya sido el año del descubrimiento de Adrianne Lenker y compañía. Con dos discos publicados a lo largo de este 2019, ‘U.F.O.F.’ y ‘Two Hands’, ambos muy bien valorados por la crítica, se han destapado como una banda de folk-rock tan descarnado como sensible en la mayoría de sus composiciones. De entre todas las canciones que han editado este año nos quedamos con este Forgotten Eyes, una de sus canciones más guitarreras y directas, en la que hacen referencia a la dura realidad de los sin techo.