Hace unas semanas, el muy recomendable No sé viure sense Rock nos presentaba de la mano de Àlvar Andreu a The London Souls y su segundo disco Here Come the Girls. Por cierto, aprovecho para señalar que algún día tendremos que hablar de todas estas webs y blogs que nos dan nuevas pistas sobre la música y nos permiten disfrutar de artículos y reseñas impresionantes, algún día hablamos de todos y todas ellas. Pero, volviendo a The London Souls, cuando los escuchamos nos despertaron la curiosidad y nos acercamos a este dúo de New York que parecen sacados del Londres de los 70, tanto en lo musical como en la estética. Tash Neal a la guitarra y la voz y Chris St. Hilaire, que se ocupa de la batería y aporta también voces, no ocultan esas influencias y presentan un trabajo que parece sacado de ese momento, realizando una mezcla ambiciosa, puede que demasiado, de sonidos que van desde el Rock con toques Blues, y ahí está Led Zeppelin como horizonte pegado, hasta el Folk más acústico, sin olvidar otras influencias más Pop. Quizá toda esta amalgama les haga perder cierta autenticidad, aunque no es menos cierto que el disco tiene muy buenos momentos aunque se resiente en algunas ocasiones. La voz de Neal, junto a sus guitarras y una contundente base rítmica de St. Hilaire, marcan sus señas de identidad.
El inicio del disco con ‘When I’m With You’ puede llegar a despistar, un tema con toques Pop, ecos de The Beatles, que luego crece en potencia, siendo una buena canción que da paso a uno de los mejores momentos del disco, la fantástica ‘Steady’, donde las influencias zeppelianas saltan por los cuatro costados. Pero en ‘Hercules’ dan un viraje tremendo al Folk, a lo acústico, una canción bonita que supone un momento de pausa en la recuperación del sonido más duro con ‘Alone’, donde destaca su inicio. Siguen por ese camino con la menos conseguida ‘All Tied Down’ y llega otro momento Folk con la preciosista ‘Isabel’, una canción totalmente acústica con la voz de Neal en falsete.
La segunda parte del disco se resiente más, la irregularidad es mayor como con ‘Crimson Revival’, a la que parece faltarle algo. Levantan con el Blues Rock de ‘Honey’ y, especialmente, con otro giro estilístico, sin salir del Rock, como es ‘The River’. Divertida, pero insustancial, es ‘How Can I Get Through’, y ‘Valerie’ tiene su punto por la propia evolución de la canción, de ese inicio más melódico a una mayor crudeza. Termina el disco con dos temas ‘menores’, el más escorado hacia el Blues ‘Bobby James’ y ‘Run Zombie Run’, que comienza en acústico, de nuevo con Neal cantando en falsete, finalizando de manera juguetona.
The London Souls son un descubrimiento interesante, una banda que parece ajustarse a un periodo determinado, pero que no han decidido una dirección clara. Hay unas cuantas canciones interesantes, y el disco en su conjunto es disfrutable. Veremos qué pasos van dando, a nosotros nos gusta mucho este ‘Steady’ en directo.