Workship the Sun es en segundo disco de los californianos Allah-Las, tras el debut homónimo de 2012 que fue aclamado por la crítica. Bajo la producción en los dos discos de Nick Waterhouse, otro de los iconos del revival Soul, aunque como hemos comentado en su disco Holly (2014) también se bifurca hacia otros cauces como el Jazz, entre otros, Allah-Las se han consolidado con un trabajo homogéneo y coherente, un disco que remite a la década de los 60, con fuertes toques de la música surf y psicodélica, y algún ramalazo del garage, y también se les ha vinculado a The Byrds. Y es que los Allah-Las hacen honor a su orgien que no es otro que Los Ángeles. Workship the Sun funciona pero nos remite a los trabajos de Waterhouse, también aseados y correctos, pero en algunos momentos sin sangre. El disco de Allah-Las peca de cierta monotonía, con algunos momentos inspirados, pero con otros más regulares. Hay buenas melodías, guitarras punzantes, acústicas, coros y ese sabor a la Costa Oeste de la década de los 60 que decíamos antes, pero no te acaban de enganchar.
Y eso que el comienzo promete con tres grandes canciones, ‘De Vida Voz’, que comienza como un tiro, ‘Had It All’ con sus guitarras, y la más completa ‘Artifact’. Pero luego descienden con la instrumental ‘Ferus Gallery’ y el medio tiempo intrascendente ‘Recurring’. No levantan el disco con ‘Nothing to Hide’ ni con ‘Buffalo Nickel’, que promete más de lo que aporta, habiendo entrado en una sierte de monotonía que te aleja del disco.
Pero con ‘Follow You Down’ se arranca la cosa, un buen tema al que le sigue la breve ‘501-415’, que es un poco diferente con el conjunto de la propuesta y la también más irregular ‘Yemeni Jade’. Parece que Workship the Sun va a caer de nuevo pero el tema que da título al disco te recupera, siendo un tema muy ambiental, una línea que sigue el conjunto de la obra de Allah-Las. ‘Better Than Mine’ es muy animada y muy pop de los 60, mientras que la instrumental ‘No Werewolf’ te deja frío. Termina con la nota más disonante de todo el disco, la más garagera ‘Every Girl’ y te quedas con la curiosidad de que podían haber ahondado en esa vía.
Un nuevo descubrimiento Allah-Las pero que nos ha dejado un tanto fríos. Apuntan cosas, calidad no les falta, pero no acabamos de conectar. La verdad es que es fácil imaginar a estos cuatro tipos en una playa de California con una hoguera y cantando estas canciones, pero sacados de ese contexto…