No ha llegado a los dos años lo que Brendan Benson ha tardado en entregar una nueva colección de canciones, menos de lo que nos tenía habituados, pero desde que creó su propio sello (Readymade Records) para la grabación de su anterior disco parece haber dejado atrás sus problemas con las productoras. Lo cierto es que nunca ha tenido el éxito de cara el cantautor de Detroit pese a que su indudable talento para las melodías pop le ha llevado a componer excelentes trabajos como The Alternative to Love (2005) o My Old Familiar Friend (2009), además de su papel fundamental como autor junto a Jack White de muchas de las canciones de The Raconteurs, banda que le ha llevado a alcanzar sus mayores cotas de éxito.
En este séptimo disco de estudio vuelve a ofrecer lo que mejor sabe hacer; puro y enérgico power pop americano destilado a partir de las más variadas influencias y presentado en gemas de apenas tres minutos, algo que nos suena de sus anteriores trabajos y que parece hacerle sentir cómodo, pese a no haberle conducido a grandes cotas de éxito. De hecho en You Were Right deja atrás en cierto modo la producción más cargada de What Kind of World, su anterior disco, y retoma los arreglos sencillos y directos.
Acompañado de una banda de lujo que incluye a los ex-Posies Jon Auer y Ken Stringfellow o al teclista Dean Fertita (QOTSA, The Raconteurs), Benson ha ido presentando varias de estas quince canciones en formato de singles antes de añadirles alguna revisión de temas antiguos y reunirlas en este disco que arranca con aires de Tom Petty (It´s your Choice) para continuar con el pop más luminoso de As of Tonight o Rejuvenate Me hasta el inconfundible sabor americano de Diamonds o Long Term Goal pasando por los vientos soul de I Don´t Wanna See You Anymore o el reggae de I´ll Never Tell. También hay lugar para los ecos de los Beattles en She´s Trying to Poison Me o en The Fritz, el power pop más característico (Purely Automatic), los juegos vocales de New Words of Wisdom y el cierre más rockero de Red White and Blues.
En conclusión; un disco variado y sin altibajos que no va a sorprender a los que conocen su trayectoria y que incluye grandes melodías que probablemente no auparán a Benson a las listas de éxitos, algo que no parece formar parte de las sencillas aspiraciones de este músico que ya cuenta con el reconocimiento mayoritario de la crítica.