Tom Petty regresaba a los Heartbreakers tras el éxito de «Full Moon Fever» con «Into The Great Wide Open» (1991). Lynne seguía al lado de Petty, como productor, músico y de nuevo en las labores de composición. Aunque el disco obtuvo irregulares valoraciones por la crítica y sólo alcanzó el 13 en el Billboard, colocó dos millones de discos, lo que le situaba entre los más vendidos de la banda. Tenía un single resultón, como «Learning To Fly», y poco más. A pesar de ello, de nuevo los directos eran el fuerte del grupo, que en 1993 publicaba el «Greatest Hits» de turno, incluidos temas de «Full Moon Fever». Esta colección de canciones llegó al 5 del Billboard y se ha convertido en el disco más vendido de Tom Petty and the Heartbreakers, con casi 8 millones de discos en Estados Unidos hasta la fecha. Allí estaban casi todos sus grandes temas, y añadía dos temas inéditos: «Mary Jane’s Last Dance», que fue un éxito y uno de los temas más importantes de Petty, y la versión de corte beatleiana «Something in the Air», de los británicos Thunderclap Newman.
En 1994, Petty decide repetir la experiencia de lanzarse en solitario, pero de la misma manera que en 1989, con Campbell siempre a su lado, y el resto de los Heartbreakers como músicos en el disco, aunque Lynch dejó la banda y fue sustituido por Ferrone a la batería. La gran novedad era la aparición en la producción, junto a Petty y Campbell, del reputado Rick Rubin. «Wildflowers» es, para mí, el último gran disco de Petty, un disco más intimista y sin los hits de «Full Moon Fever». Muy escorado hacia el sonido americano, cuenta con grandes temas («Wildflowers», «You Don’t Know How It Feels», «Crawling Back To You», «Wake Up Time»), pero lo que destacaba era el conjunto.
Con menos repercusión todavía, Petty y los Heartbreakers publican en 1996 la BSO de «She’s The One», una película de Edward Burns, y con Rick Rubin en la producción de nuevo. Pero comenzaron a espaciar su producción y sus discos se fueron instalando en una especie de «piloto automático», sin dejar de girar eso sí. Con Rubin de nuevo, «Echo» (1999) pasó sin pena ni gloria, en un momento complicado de Petty, que estaba atravesando un divorcio en el momento de su composición. En 2000 se publicó una recopilación doble y en 2002 llegó «The Last DJ», donde George Drakoulias sustituía a Rubin. Muy irregular también, nos dejó alguna canción relevante como «The Last DJ» o «You and Me»:
No sería hasta 2006 cuando tuvimos novedades de Tom Petty, que lanzaba su tercer disco en solitario, recurriendo de nuevo a Jeff Lynne, y con Campbell a su lado. De hecho, sólo participaron ellos tres en el disco. El resultado, un trabajo que elevó la calidad de sus últimas producciones, un trabajo que también era más introspectivo y melancólico, que como «Wildflowers» hay que valorar en su conjunto. Curiosamente, llegó al 4 en el Billboard, su mejor posición desde el «Greatest Hits» de 1993.
En 2008 reunió a su primera banda, Mudcrutch, incluidos Campbell y Tench, más escorados al country y al rock sureño, y en 2009 publicó un disco en directo de lo más recomendable: «The Live Anthology». Cuatro CDs, y una entrega más en el caso del vinilo, con canciones grabadas en vivo a lo largo de toda su trayectoria. Es uno de esos discos históricos, no sólo por la calidad de las canciones sino por ver cómo evoluciona la banda en su sonido, que suena impecable. Además de la gran mayoría de sus clásicos, ofrecían numerosas versiones, destacando a mi juicio las de «Friend of the Devil» (Grateful Dead) y «Mystic Eyes» (Van Morrison). Ni que decir tiene que sus últimos discos apenas estaban representados. Sin duda alguna, este es un gran disco para adentrarse en la obra de Tom Petty and the Heartbreakers.
Y llegamos a 2010, cuando con un nuevo cambio de productor, en este caso Ryan Ulyate, la banda entrega disco, esta vez de mayor calidad que la errática dirección que llevaban desde mediados de los 90. «Mojo» fue un trabajo con una mayor presencia del blues, y que Petty definió como una jam session, siendo un disco más contundente. Con «Mojo» lograron además alcanzar el 2 del Billboard.
Nos quedamos a la espera de escuchar con detenimiento «Hynotic Eye», presentado como una vuelta a los orígenes. Tom Petty and the Heartbreakers, unos clásicos en vida, una banda que está a la altura de los grandes porque es uno de ellos y cuya influencia se deja notar en buena parte de los grupos de rock americano. Esperamos verlos un día en España, aunque mucho nos tememos que eso no será posible. Tom Petty and the Heartbreakes y su «I Should Have Known It» de «Mojo»: