Quedan unas pocas semanas para la publicación del nuevo disco de nuestro querido y admirado Josh Rouse, que llevará por título Love in the Modern Age, pero nos toca echar la vista atrás para recordar su mejor disco, el imbatible 1972 (2003) que cumple quince años. Josh Rouse, que con sus dos últimos discos ha demostrado haber recuperado su buena forma, y del que hemos escrito en numerosas ocasiones, la última de su concierto en Logroño a finales de 2015, logró con 1972, que hacía referencia a su año de nacimiento, una revisitación de los sonidos de los setenta, incluida una portada que remitía directamente a ese periodo y por no hablar del libreto del CD. Rouse venía de insertarse en esa corriente denominada ‘Americana’ pero iría puliendo su sonido con toques más Pop y Soul. De hecho, ya en el fantástico Under Cold Blue Stars (2002) había algunas de las claves que explotarían en su cuarto trabajo que, a su vez, contaría con una exquisita producción a cargo de Brad Jones. En el disco cabrían vientos, cuerdas, coros fantásticos y otros elementos, pero el disco contaba con grandísimas canciones, que nos siguen acompañando.
El comienzo era para la canción que daba título al disco, ‘1972’, un gran tema suave y delicado con una gran melodía y con unas cuerdas preciosas. El primer gran golpe venía con ‘Love Vibration’, maravillosa, con ese sonido, esa base rítmica, destacando el bajo, ese estribillo y esos coros, y ese saxofón al final…En fin, caí rendido a esta canción desde el primer momento que la escuché. Con ‘Sunshine (Come on Lady)’ la fiesta no para, con un punto Pop que va creciendo y con un Hammond al final que le da una gran personalidad. Por su parte, en ‘James’ adopta un tono más melancólico con la voz de Rouse en falsete en algunos momentos. Y para finalizar la primera parte, la divertida y animada ‘Slaveship’, donde vuelven a destacar los coros.
‘Comeback (Light Teraphy)’ es otro de los grandes temas del disco, un bajo que marca el ritmo y que nos remite a los setenta en el comienzo de la canción y que luego va derivando a otro terreno, sin olvidar la flauta, las cuerdas, etc. La melancolía y la tristeza regresa con ‘Under Your Charms’, con un Rouse que canta suavemente al comienzo. La calidad se mantiene por todo lo alto con ‘Flight Attendant’, que cuenta con un punto atmosférico al comienzo y al final crece en intensidad gracias fundamentalmente a los vientos. Con ‘Sparrows Over Birmingham’ se inserta en sonidos más Góspel, siendo una canción con un tono más espiritual. Y el cierre es para ‘Rise’, otro tema que te gana por la melancolía y la nostalgia y que cuenta con una gran melodía, acabando por todo lo alto.
Ya han pasado quince años de este 1972, y catorce se van a cumplir de nuestro primer concierto de Josh Rouse en el Azkena de Vitoria, cuando vino a presentar este disco. Nunca hemos dejado de escuchar este disco, un trabajo que nos sigue marcando por más que pasen los años. Un disco que sitúo a Rouse en otra posición, aunque él ha mantenido una carrera posterior de perfil más bajo. Esperamos su nuevo trabajo con ganas.