No cabe duda que Paul Weller es uno de los iconos de la música popular de las últimas cuatro décadas, bien con The Jam, bien con The Style Council, bien en solitario. Weller siempre ha hecho lo que ha considerado oportuno y su discografía está plagada de grandes aciertos así como de algunos trabajos menos logrados. Cada una de sus novedades siempre son acogidas con expectación aunque no es menos cierto que últimamente va con el piloto automático, aunque yo he disfrutado con discos como A Kind Revolution (2017) o, más lejos, Wake up the Nation (2010). True Meanings se encuadra en los trabajos que me dejan indiferente y que ha sido recibido con división de opiniones. Es un Weller más crepuscular y acústico, con un trabajo muy producido en esos toques orquestales y de cuerdas, pero que se hace muy largo, especialmente en el último tramo del disco. Por momentos quiere recordar al fantástico 22 Dreams (2008), una delicia en la que combinaba diferentes visiones, pero no llega. Hay algunos temas que sí, que parece que Weller va a dar con la tecla pero no.
«The Soul Seachers» es un comienzo esperanzador, un tema bonito que va de lo acústico hacia sonidos más sofisticados y ambientales, levantando el vuelo con el Hammond del final. «Glide» parece presentarse como un tema de madurez, un tono campestre que no acaba de funcionar y menos con esas cuerdas en clave de vals. «Mayfly» es más interesante, su voz es más ronca contrastando con una canción delicada y con unos vientos sutiles. Y «Gravity» es un tema que también funciona gracias al tono melancólico y a unas cuerdas bien insertadas. Pero en «Old Castles» adopta un tono incluso jazzístico siendo un tema de los más flojos del disco. Se recupera con «What Would He Say?», una canción acústica en el comienzo que da paso las cuerdas reforzando la melancolía. «Aspects» es seguramente el mejor tema del disco, muy melancólico igualmente y muy logrado.
En «Bowie» rinde homenaje a David Bowie, un tema muy ambiental aunque luego acaba finalizando de forma muy insustancial. En «Wishing Well» se lanza a un minimalismo mayor, con un tono campestre y más Folk, cambiando su forma de cantar. Pero con «Come Along» comienza la peor parte del disco, canciones que no aportan mucho como la que nos ocupa. «Books» sigue en esa misma senda, comparte voz con Lucy Rose y Noel Gallagher aporta su toque con el armonio pero es un tema que no te llena. «Movin On» es una canción más lograda, el tema crece con las cuerdas, pero con «May Love Travel With You» a uno se le hace ya muy largo el disco. Y «White Horses» comienza con esa misma sensación pero a mitad de camino sube su fuerza pero sin destacar.
Como decíamos, ha habido diferentes visiones del disco de Weller, desde las más elogiosas, incluso llegando a compararlo con Nick Drake, hasta críticas muy duras cuestionando su estado de forma. Creo que es un disco al que le sobran algunas canciones y en el que Weller abusa un poco de la fórmula elegida, aunque también hay algún acierto. Sin embargo, no quedará entre sus grandes obras.