No son infrecuentes las bandas y sus discos que se agarran a un sonido o época del pasado. Es el caso de The Lemon Twigs, banda de New York compuesta por los hermanos Brian y Michael D’Addario. Su tercer disco, Songs for the General Public, es un viaje a los sonidos de los setenta. Con el Glam en primer plano, hay espacio para Bowie, T-Rex, Elton John, pero también para Wings e incluso canciones más Pop y de Power Pop. Épico y psicodélico, The Lemon Twigs tienen clara la apuesta, con la producción de Jonathan Rado, del dúo Foxygen que también juega en esa liga. Desde la portada, el disco no engaña y te lleva a través de canciones teatrales e intensas a la década señalada, aunque es cierto que el disco va de más a menos, incluso con algunos momentos de irregularidad. Como ejercicio de estilo, funciona, pero siempre te queda una sensación rara, como de quedarse a medias. También nos pasó con los propios Foxygen en su momento. Ojo, que esto no quiere restarles legitimidad ni valía, pero no sé si es un disco que escucharé mucho en los próximos meses. Hay canciones interesantes, por supuesto, y son divertidos, pero…Vayamos con el disco.
El comienzo no puede ser mejor con la muy Glam «Hell On Wheels», ampulosa, excesiva y con unos coros que se convertirán en la «marca de la casa». En la misma línea «Live in Favor of Tomorrow», más melódica y se va hacia el Pop Rock. «No One Holds You (Closer Than the One You Haven’t Met)» que supone una vuelta a la teatralidad del comienzo. En «Fight» se inspiran en el Bowie más dramático y los coros vuelven a ser predominantes. Con «Somebody Loving You» ponen cierta pausa, utilizan el falsete, pero no dejan de lado la teatralidad. «Moon» cierra la primera cara con un regreso al Glam, épica de nuevo con esos coros expansivos.
Con «The One» ahondan en el camino que siguen, se hace reiterativo, y «Only a Fool» remite al The Rocky Horror Picture Show, teatralidad a raudales que nos deja una canción muy difusa. Levantan el tono con «Hog», todavía más grandilocuente si cabe, y mira que era difícil, aunque es una de las canciones mejores del disco. «Why Do Lovers Own Each Other?» es más lenta, minimalista incluso, con un piano como protagonista y luego asciende, pero es uno de los puntos más bajos del disco. En «Leather Together» le dan el protagonismo a las guitarras, y la cosa mejora con una de las canciones más Rock del disco. El cierre es para la acústica y contenida «Ashamed» que, de nuevo, no acaba de funcionar.